Pues aquí tenemos, un par de horas tarde, pero dentro del día acertado, la autopsia del breve poema que leíamos ayer. Espero que os agradara y os agrade su autopsia, que es, si cabe, algo más breve que el poema original. (1 página)

Historia: Este poema lo escribí a raíz de un episodio de Ghost in the shell, stand alone complex second gig. Serie con un nombre quilométrico pero de gran calidad. Sea como fuere en uno de los episodios, mientras están vigilando una ciudad a la espera de que aparezca un criminal, uno de los protagonistas da con su hija, que parece poder seguir sus pasos, aún a pesar de llevar camuflaje termo óptico. Eso viene a querer decir que era invisible, si bien los perros seguían pudiendo olerle. En todo caso la niña termina por resultar que es ciega. Os he chafado el episodio, lo sé, pero en todo caso esa historia fue la que dio nacimiento al poema.

Nacimiento: Como ya se viene convirtiéndose en habitual, partiendo de la imagen anteriormente descrita el poema fluyó con bastante simplicidad. Lo cierto es que este es uno de los poemas más cortos que he escrito. Normalmente me ocupan alrededor de una página, o página y poco, mientras que este me ha ocupado únicamente media. Esto se debe a que procuré ceñirme a la idea esencial, sin añadir, como acostumbro, otras ideas y apreciaciones secundarias. Estoy satisfecho con el resultado del experimento, aunque no puedo decir si seguiré practicando este estilo o no. Atenea dispondrá.

Curiosidades: Todas las escenas reflejadas en el poema aparecen en algún punto del susodicho episodio, daría más señas del mismo pero no recuerdo cual es en concreto.

Y hasta aquí la breve autopsia para un breve poema, espero que os haya gustado, ahora tengo que ponerme con la siguiente parte del relato en el que en teoría he estado trabajando. Las vacaciones son malas para estas cosas porque te da por salir y socializar.