Calor perdido

Este poema lo inspiró una tragedia ajena. No hace mucho una conocida lo dejó con su pareja. El caso es que, hace unos días, me dijo medio en broma que le escribiera un poema a su desgracia. Hoy me ha venido una idea al respecto y me he lanzado a la piscina. Espero que os guste.

Calor perdido

A veces sueño
con un calor almibarado,
un calor sutil, tierno,
calor apasionado
de un sentimiento muerto.

Si te has marchado
¿Por qué siento aún el fuego
de cada beso que me has dado
jurando amor eterno?

Si me has abandonado
¿Por qué grita mi pecho,
roto y desesperado
por tenerte en mi lecho?

En una caja de cartón
guardé cada palabra,
cada ilusión,
y tu mirada.

Por la noche me acosan los fantasmas
que gimen desde ese ataúd austero,
susurrando recuerdos,
suspirando baladas,
al calor de tu cuerpo
que me acompaña mientras sueño

Pero al despertar alargo la mano
buscando en los rincones de mi cama,
una esquirla de un fragmento soñado
Y encuentro sólo el vacío y la nada.

Y aún así…

En el espejo reflejado
te veo a ti, te siento,
sonriendo a mi lado.

(20/11/14)


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *