Un poema que por una vez lleva varios días escrito. Siguiendo con el tono nostálgico con el que llevo ya algunos trabajos este poema se centra, tal y como deduce por el título, en un tema que si bien se ha insinuado en los anteriores poemas no se había tratado en solitario. Espero que os guste. (1 página)

Noches de sexo sin sentimiento

Dos amantes se encuentran en la noche y son…
Cuerpos henchidos de pasión,
Inflamados en el voluble sudor de una tarde de otoño.
Trepan sus sombras por la pared
Abigarradas figuras meramente insinuadas
Que se besan, se abrazan, se consumen con más amor
Que sus dueños de carne fresca y corazones rotos,
Sus dueños esculpidos en hambre anhelo y sed
Brillando con las sombras de las palabras insinuadas.

Pues no hay pedazo de saliva humana,
Gota de carne, palabra de sueño,
Instante perdido en la memoria
Ni página del humano pensamiento
Erguida sino para encerrar verdad negada.

Dos amantes se encuentran
Y hierve sangre caliente,
Entregados a intimidad de una soledad fingida
Se agreden, se insultan y se querellan
A la luz de un pedazo de cera incandescente.

Mas se abrazan las sombras
Bailan y se funden
Entonando silenciosa melodía
Sombras que sin embargo se intuyen
Más reales, más libres y gozosas
Más carentes de la humana hipocresía

La vela se consume y se hace la oscuridad
Y por un momento todo es amor
Mientras brota a flor de piel la verdad perdida,
Dos amantes se ven con las manos y se acarician el corazón,
Dos amantes envueltos en la sombra de un secreto entre gemidos
Que sin embargo que aterrados echaron a hablar
Plantando sobre sus pieles y pupilas la flor de una mentira compartida.

Mas pese a todo…

Cuanto hecho de menos esas noches de sexo sin sentimiento Afrodita,
Cuanto hecho de menos esas noches lejanas, Eros.

(04/08/11)